Abren expediente a dos localidades leonesas por daños a una calzada romana

La Junta de Castilla y León ha abierto expediente administrativo sancionador a los ayuntamientos leoneses de Castrocalbón y de San Esteban de Nogales por las obras promovidas por la Mancomunidad La Cabrera-Valdería que han causado daños a un tramo de 1,2 kilómetros de una calzada romana.

La delegada territorial de la Junta en León, Ester Muñoz, ha informado este miércoles que la denuncia por los daños llegó la pasada semana y que ayer el arqueólogo del servicio territorial de Cultura se desplazó hasta la zona para comprobar los supuestos daños causados.

Su informe preliminar señala que dicho camino, que toma el nombre de Calzada del Obispo o Calzada de Nuestra Señora, tiene su origen en Astorga, la antigua Astúrica Augusta romana y su fin en la ciudad también romana de Braga, o Bracara Augusta, en Portugal.

Se trata de un itinerario antiguo muy bien identificado, especialmente por su trazado y los importantes restos que aún atesora, consistentes en un terraplén muy destacado sobre los terrenos circundantes y que tiene uno de sus mejores ejemplos en el Monte de la Chana, en la calzada de la Valdería-Castrocalbón, en un tramo de aproximadamente 3,8 kilómetros.

Un simple “alisado” para eliminar baches

El alcalde del Castrocalbón, el socialista Luis Antonio Cenador, niega los daños y afirma que se ha tratado de un simple “alisado” para eliminar baches. Además, recuerda que es una de las obras de viales rurales que ha asignado la Mancomunidad de La Cabrera-Valdería a los municipios que la conforman, y subraya que la actuación contó con una memoria pública a la que no se presentó ninguna alegación.

1,2 kilómetros de calzada afectados

En la inspección realizada este martes, se comprobó que las obras llevadas a cabo hace unos días en este trazado han afectado a aproximadamente 1,2 kilómetros del antiguo itinerario romano, desde el comienzo de los trabajos en el paraje denominado los ‘Corrales de la Devesa’ hasta su final en el de ‘La Chana’, cerca de la fuente del Robledo.

El informe arqueológico precisa que la calzada romana presenta la particularidad de haber sido reservada por un camino que discurre paralelo a ella, circunstancia a la que se debe su conservación, pero tal camino ha sido ahora agrandado considerablemente en su anchura y dotado de cunetas que lo flanquean a ambos lados, lo que ha afectado al terraplén, ya que la calzada va por este lado.

Se abrirán diligencias penales

Por tanto, y ante la supuesta infracción contemplada en la Ley de Patrimonio Cultural de Castilla y León, la Junta abre expediente administrativo a los dos ayuntamientos implicados.

De manera paralela, este miércoles se ha recibido el atestado de la Guardia Civil que avanza que previsiblemente se abran diligencias penales por lo que el trámite administrativo quedaría paralizado hasta dirimirse la vía penal.

Una de las calzadas mejor conservadas

Esta vía romana, considerada por los expertos como una de las mejor conservada de la península, fue construida entre los años 79 y 80 durante el imperio de Vespasiano y su hijo Tito con fines comerciales y restaurada en tiempos de Maximino el Tracio y su hijo Máximo y su trazado es uno de los que conserva el mayor número de miliarios (piedras que señalizaban las distancias) de toda Europa.

El tramo de vía afectado por estas obras se localiza en el itinerario Antonino A-18 o Vía Nova, una calzada romana que aparece con el número XVIII en el Itinerario de Antonino, que unía las ciudades de Bracara Augusta (actual Braga), capital del convento bracariense, y Asturica Augusta (Astorga), capital del convento asturicense, a lo largo de unas 210 millas romanas (unos 330 kilómetros).