Natasha, refugiada ucraniana en España, relata su odisea desde la invasión rusa: “Mi marido no puede salir, es hombre”

Todo es mentira ha acogido en su plató este viernes a Natasha Ivzhenko, una refugiada ucraniana en Zaragoza, que ha hablado de su experiencia huyendo de su país por la guerra con sus hijos y de la actual situación del conflicto bélico con Rusia.

Hace un año que comenzó la invasión rusa, después del conflicto en Crimea de 2014, y la invitada ha relatado su estado anímico: “Ojalá sea el primer aniversario y el último, que es lo que creo y sueño yo”.

“Es difícil, nos fuimos en marzo del año pasado y llegamos hasta Zaragoza, y yo me convertí en madre, en padre, en abuelos… Sigo viviendo allí, cuidando de mis hijos”, ha contado. “Me cuesta mucho, la herida que hicieron los rusos es muy profunda. Pero no queda otra y tengo dos opciones: llorar en casa y no hacer nada o hacer que mis hijos siguen adelante”.

“En agosto pudimos cruzar la frontera en Polonia y pasamos siete días en un pueblo con mi marido. No puede salir, es hombre y debería estar combatiendo, pero no todos los hombres pueden combatir. Él se siente útil allí y es mecánico de coches”, ha relatado. “Hablamos cuando tiene cobertura”, ha explicado.

En cuanto a sus hijos, Natasha asegura que el de 14 años “es consciente”: “Habla con sus amigos en Ucrania cuando puede, y le cuentan”. “Yo vivía cerca del aeropuerto militar, y fue el primer objetivo del ejército ruso”, ha recordado.

En cuanto a cómo se está viviendo un año después, la refugiada ha expresado: “Nos hizo muy fuertes a todos. Las cualidades de los ucranianos se despertaron, y podéis ver cómo nos ayudamos, como colaboramos y como hacemos colaboraciones”. Además, se ha mostrado positiva: “Seguramente vamos a ganar, lo bueno siempre gana”. La ucraniana volverá a casa “cuando se acabe la guerra”.