Crece la preocupación por María Teresa Campos: la presentadora tiene el teléfono restringido y apenas sale

La presentadora María Teresa Campos no está pasando por un buen momento. Desde que se ha quedado sin ofertas de trabajo, la periodista vive sumida en la tristeza y prácticamente pasa todas las horas del día en su casa. Además, ahora ha crecido la preocupación en torno a ella.

A pesar de que se encuentra en perfectas condiciones de salud a sus 81 años y rodeada de su familia, Campos echa de menos ponerse frente a la cámara y aún intenta buscar una explicación a que Telecinco prescindiese de ella sin siquiera darle una buena despedida.

Recientemente, Españadiario ha afirmado que María Teresa tiene su teléfono restringido, pues tan solo coge las llamadas de dos amigos íntimos, además de su familia más cercana. Tal y como ha contado una fuente próxima al citado medio, “ella está bien, con sus cosas, pero en esencia bien. Lo que pasa es que la gente no entiende que ya está fuera de esta onda y no quiere nada”.

Ver esta publicación en Instagram

Una publicación compartida de ALEJANDRA RUBIO. ALX (@alerubioc)

Como viene siendo habitual en ella durante los últimos meses, la presentadora no ha salido de casa durante las Navidades, pues “está apenada” también por la crisis en la relación entre su hija Carmen Borrego y su nieto, José María Almoguera.

Lo cierto es que María Teresa se ha ido enterando de todo por Sálvame, aunque al principio creía que era todo guionizado. “Se preocupó mucho cuando vio a Terelu dirigirse en esos términos a Paola en directo. Hasta entonces, se pensaba que estaban haciendo televisión“, afirma su entorno.

Sin embargo, María Teresa siempre está muy bien rodeada y apoyada por su gente. Una de las personas que más cariño le está dando es Yusan Acha Frías, íntimo amigo y director de Qué tiempo tan feliz, espacio que presentó entre 2010 y 2017.

Hace unas semanas, Yusan aseguró que “Teresa, obviamente, tiene edad y los achaques lógicos, pero, sobre todo, y por encima de todo, está aburrida. Siempre ha tenido mucha actividad y el estar ahora en casa sin nada que hacer la deja aburrida y triste. Y sin ganas de nada”.